Sí, el piso epóxico de grado industrial está diseñado para resistir las condiciones exigentes de almacenes, fábricas y talleres. Estos recubrimientos soportan tráfico constante de montacargas, transpaletas y movimiento continuo de equipos pesados. El epóxico crea una superficie de alta resistencia a la compresión, lo que significa que puede soportar grandes cargas sin agrietarse. También ofrece una gran resistencia a químicos como solventes, ácidos y aceites, algo fundamental en entornos industriales. Para mayor seguridad, se pueden añadir agregados antideslizantes en zonas propensas a derrames de aceite o agua. Según mi experiencia, un piso epóxico industrial bien instalado puede durar muchos años, incluso en operaciones 24/7 — es una solución comprobada para proteger pisos de concreto en ambientes exigentes.